La piel sensible es frágil, clara y propensa a rojeces y patologías como pueden ser el acné, la dermatitis, la rosácea…etc. Además experimenta sensaciones de incomodidad como tirantez, enrojecimiento, picor, quemazón o escozor, que pueden ser permanentes.
Entre los factores externos que pueden desencadenar sensibilidad de la piel, la contaminación ambiental, que en invierno suele aumentar, no sólo ensucia la piel sino que la irrita. El calor, el frío, el viento y los cambios bruscos de temperatura, aumentan estos desequilibrios.
¿Cómo consigue dulkamara bamboo su eficacia para equilibrar este tipo de pieles?
Sus fórmulas magistrales ayudan a la piel a equilibrarse. Se basan en plantas medicinales, aceites vegetales de primera presión y aceites esenciales naturales obtenidos por destilación o por expresión en frío. Reúnen gran cantidad de principios activos bio-disponibles, actúan desde las capas más profundas de la piel, de forma natural y los beneficios de esa acción se reflejan en la epidermis.
La combinación de sus principios activos hidrosolubles y liposolubles, aporta nutrientes fundamentales como ácidos grasos insaturados, carotenos, vitaminas, polifenoles y antioxidantes que tienen un efecto suavizante sobre la piel y reducen la pérdida de humedad.
La equilibrada acción cosmética de sus productos, depuran, calman, alivian y relajan la piel favoreciendo su regeneración.
¿Cuál es la correcta rutina completa para el cuidado de las pieles sensibles?
En la ducha recomendamos utilizar en la ducha el Jabón fitoactivo, que limpia sin alterar el manto ácido de la piel, respetando su barrera lipídica y su pH. Hidrata, suaviza, protege, tonifica, remineraliza y calma las rojeces. Limpia sin alterar el manto ácido de la piel, respeta su barrera lipídica y su pH.
Es muy importante no frotar la piel y tratarla de forma suave y sin fricción. Al aplicar cualquier producto sobre ella, se realizará de forma lenta y a bombeos para ayudar a que lo absorba lentamente, de forma natural. Sentirás que tu piel se identifica con nuestras joyas vegetales porque gozará de sus principios activos, naturales, vivos, sin transformaciones, aportándole todo lo que necesita para estar en su estado más bello y saludable. PRUÉBALO!!!
Ritual diario a realizar en el rostro.
Por la mañana realiza la biolimpieza empapando bien un disco de algodón con la Leche virginal bambú. De forma lenta, suave y a bombeos lo pasas por todo el rostro. Comienza por la nariz para percibir su aroma, sigue por los labios, después siques con suaves bombeos y círculos alrededor de los ojos y vas haciendo lo mismo por todo el rostro. Verás qué bien te sientes!
Posteriormente, pulveriza un poquito de la Leche virginal bambú y seguidamente, antes de que penetre en la piel, aplica una dosis del Aceite revitalizante por todo el rostro a toques, con suaves bombeos. Verás que penetra enseguida.
Después, aplica el bálsamo. Coges una pequeñita cantidad, frotas las manos entre sí para que coja temperatura y de forma lenta, suave y a bombeos, vas posicionando tus manos por todo el rostro, (frente y mentón, mofletes, por toda la cara y terminas con bombeos en el cuello).
Puedes renovar la aplicación del bálsamo al medio día o en cualquier momento del día si lo deseas, especialmente si hace mucho frío o viento.
Recuerda aplicar el bálsamo día y noche en contorno de ojos, labios y contorno de labios.
Para finalizar, si te gusta aportar un poquito de color a la piel o trabajas frente al ordenador o pantallas, aplica un poquito de la Crema complex color, que protege de humedad, frío, sol y luz azul de la pantallas, depura, calma y desintoxica la piel. Verás que tiene un efecto de “buena cara” inmediato. Te va a encantar!!!!
Por la noche, después de la biolimpieza con la Leche virginal bambú, con la piel seca, ponte el Micronizado dermo-calmante por todo el rostro. Puedes aplicarlo con las manos limpias o con un pincel cosmético limpio de pelo suave. Lo puedes aplicar en cualquier momento del día para calmar la piel si notas picor, escozor o quemazón para aliviar y calmar la piel.
Pasado un ratito, cuando vayas a ir a dormir, te pones un poquito de la Crema facial hidro-nutriente también con suaves toques y a bombeos.
Con la aplicación regular de los biocosméticos dulkamara bamboo, la piel se fortalece y se equilibra, consiguiendo una epidermis hidratada, calmada y menos reactiva. Verás cómo van desapareciendo los problemas de sensibilidad, calor, picor, escozor y rojeces.
Gracias a la combinación de sus principios activos, la piel volverá a lucir un cutis claro, sedoso y porcelánico.
Disfrutarás de tu piel bella y saludable.
Conclusión: Si estás buscando un tratamiento que te ofrezca resultados visibles y duraderos, respetando al máximo la naturaleza de tu piel, dulkamara bamboo es la opción ideal. ¡No esperes más para probarlo y descubrir el secreto para una piel equilibrada, radiante y joven!